¿CONSERVAREMOS LA BIODIVERSIDAD?
La ONU proclamó al 2010 como Año de la Biodiversidad. Pretende alertar al mundo sobre las gravísimas consecuencias que sobrevendrán a la pérdida constante y permanente de especies y ecosistemas.
Para disponer de alimentos, agua, materias primas, medicinas…, y para preservar nuestra salud, necesitamos ecosistemas en equilibrio. Conservar las funciones naturales en buen estado es mucho más barato que reproducirlas artificialmente. Además, no tenemos ningún derecho a destruir especies y ecosistemas que las generaciones futuras necesitarán más que nosotros para afrontar los cambios que se avecinan.
Cada día que pasa, todos somos más pobres, porque la biodiversidad es el capital más preciado que tenemos los humanos. Es el tejido que sostiene nuestra vida. También, cada día que pasa es más difícil discernir y separar las causas de esta pérdida, porque se superponen, se entrelazan y se retroalimentan con necesidades económicas.
En Madrid, hace unos días, se realizó una reunión de países europeos con el objetivo de fijar metas para limitar esta especie de catástrofe silenciosa. Las decisiones se proyectarán a nivel mundial. Esperemos que no suceda lo mismo que en Copenhague.
¿Lograrán establecerse, algún día, leyes básicas, universales, para proteger a las especies comprometidas o en vías de extinción?
¿Cómo se podrá armonizar, en los países pobres, la protección de las especies y las necesidades de la población?
¿Comprenderán los dirigentes del mundo que el planeta ya no dará más oportunidades y que los daños que se ocasionan hoy son irreversibles?
¿Habremos avanzado, en el mundo, en estos temas, hacia el 2050?
Nelson Bigo 12/02/10
www.comoviviremosen2050.blogspot.com
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